Turquía es un país precioso, con muchas cosas buenas y seguro para el turista, no obstante sí que hay un par de cosas que deberías saber antes de iniciar tu viaje por este país. Y es que los turcos son personas muy hospitalarias, pero hay veces que la hospitalidad se confunde con el engaño y aquí es donde podemos caer en alguna de sus trampas para turistas en Turquía. Te contamos las más habituales.
Limpiadores de zapatos
Seguramente durante tu viaje por Estambul te encuentres con algún limpiador de zapatos en la calle, suelen ir con una pequeña caja de herramientas de madera y ojito porque un truco que suelen hacer para que al final les acabes pagando es que: dejan caer discretamente su cepillo (en algunos casos te lo lanzan a los pies un poco más descarado) para que tú se lo devuelvas, cuando lo haces te insisten en limpiarte los zapatos gratuitamente en señal de agradecimiento y cuando ya has aceptado y ha acabado de limpiártelos, te pide una propina muchas veces desproporcionada. Así que ya sabes, ¡ojito con esto!
A nosotros nos pasó que estábamos en la estación de autobuses de Eminönü que hay frente al puente de Gálata esperando para tomar el autobús que nos llevaría a la zona del Balat, y queríamos saber si estábamos bien en la dársena en la que nos habíamos puesto, así que preguntamos a un señor aparentemente normal y si nos descuidamos nos lleva andando hasta allí poniéndonos la excusa de que él vivía allí y que iba para la zona, luego le vimos que llevaba uno de esos maletines de madera portátiles, y por si no nos había quedado lo suficientemente claro, tras nuestra negativa a ir con él, dejó disimuladamente caer a nuestros pies uno de sus magníficos cepillos.
No pasa nada con esto, simplemente evita devolver los cepillos que encuentres por la calle y ya está.
Cuidado con los taxis
Puedes encontrarte en Estambul con taxis piratas que querrán darte una vuelta más larga de lo habitual y cobrarte un precio desorbitado, por eso no te fíes de los coches que no lleven un distintivo oficial ni taxímetro. Siempre escoge los vehículos que estén bien identificados como de servicio público.
Nosotros recomendamos usar aplicaciones como Uber porque es lo más fiable y ofrecen un precio más justo.
El juego del regateo turco
Los turcos son expertos en el arte del regateo, les gusta que los turistas regateen con ellos y cuando creas que has obtenido un buen precio seguramente ellos sigan sacando gran beneficio así que si el precio que te dan no te parece justo o correcto no olvides que hay muchíiisimos puestos en los que encontrarás los mismos productos y probablemente por precios distintos. Así que no tienes que comprar todo en el primer puesto en el que te ofrezcan.
Personas desinteresadas
Puede ser que un local se te acerque aparentemente de forma desinteresada para darte un mapa “gratuito”, una explicación o anécdota en tu idioma, o incluso tomarte una foto, pero muchas veces esto se convierte en un servicio por el que tendrás que pagar.
Muchas veces es interesante lo que los locales quieren contarte de su ciudad y ofrecerte su punto de vista, esto hace que tu viaje se enriquezca más, siempre y cuando ese recuerdo no quede emborronado por una situación comprometida en la que te puedes encontrar cuando al final de esa explicación te piden algo a cambio cuando tú no has tenido la iniciativa de pedirlo, por eso también te recomendamos que si lo que quieres es una buena explicación de la ciudad que hagas un free tour reservado, así no te llevarás sorpresas.